El trasplante de cejas es un tipo de trasplante que se realiza en personas que sufren lagunas genéticas o zonas afectadas por múltiples depilaciones. En el trasplante de cejas se utiliza el método FUE. El trasplante de cejas requiere una "profesionalidad" de alto nivel, ya que las cejas son el factor principal de la expresión facial. Además, como consecuencia de la frecuente depilación de las cejas, como respuesta del organismo, las cejas empiezan a adelgazarse al cabo de un tiempo. Al igual que el trasplante capilar, la caída del pelo de las cejas puede deberse al cansancio, el estrés y los traumas psicológicos. Tener una línea de cejas sana es muy importante porque expresa la personalidad del rostro. Hoy en día, desde que la forma de las cejas gruesas ha vuelto a su estado anterior, la mayoría de las personas que tienen cejas finas o una línea de cejas extraña recurren a soluciones temporales como el dibujo de cejas, el maquillaje permanente y otras. Estas soluciones son costosas económicamente porque deben realizarse cada uno o dos años.
Cualquier especialista en trasplante de cejas empieza primero por determinar la forma de la ceja, teniendo en cuenta el grosor y el tamaño de las cejas, ajustando el espacio entre las cejas y adaptando su longitud a la forma de la cara. A diferencia del tatuaje temporal o permanente de cejas, el tinte de cejas y otras soluciones, los folículos pilosos se trasplantan de uno en uno para crear un aspecto natural. Al utilizarse la técnica de la cosecha, las cejas trasplantadas no pueden separarse de las originales. Esta operación se realiza con anestesia local. Las raíces del pelo extraídas de la zona de detrás de las orejas se trasplantan una a una a las cejas. Dado que el pelo más adecuado para las cejas es el que se encuentra detrás de las orejas, se utiliza esta zona para el trasplante de cejas.
Las cejas empiezan a aparecer unos 3 meses después de ser trasplantadas y siguen creciendo durante al menos 7-8 meses, y continúan creciendo hasta completar su periodo de crecimiento y adoptar la forma de las cejas naturales en el plazo de un año. Al principio, como el ritmo de crecimiento del pelo y el de las cejas son diferentes entre sí, el pelo crece de forma desigual. Estas cejas pueden corregirse cada 15 días para recuperar su posición normal. Suponiendo que las mujeres se corrijan las cejas cada 20 días aproximadamente, no debería suponer un gran problema. Al cabo de un año, las cejas trasplantadas empiezan a adaptarse a la zona, para crecer al mismo ritmo que las cejas originales al segundo año.
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